Estudios elaborados muestran que aquellas bebidas que se elaboran mediante sistemas de fermentación naturales y que poseen baja graduación alcohólica, (ej. la sidra, el vino y la cerveza), poseen grandes beneficios para la salud de quien las consume con moderación.
Pues bien aquí os dejamos una comparativa de los beneficios de la sidra y el vino.
Tanto la sidra como el vino destacan por su riqueza en determinadas sustancias antioxidantes, ideal para el cuidado de nuestra salud cardiovascular, ayudándonos de forma positiva en la prevención frente a enfermedades coronarias y cardiovasculares. No obstante, la sidra es más recomendada y beneficiosa, ya que su aporte en alcohol es mucho menor.
La sidra como el vino son bebidas capaces de bajar los niveles de colesterol malo (LDL).
El vino contiene vitaminas que combaten el envejecimiento y ayudan a tener una piel más bella.
La sidra es diurética y depurativa, favoreciendo la reducción de líquidos corporales.
El vino por su parte, ayuda a la digestión de proteínas, es por esto que se recomienda acompañarlo con carnes.
La sidra una bebida digestiva que ayuda a regular determinadas funciones intestinales, absorción del agua, efectos laxantes y equilibrio de la flora.
Tanto la sidra como el vino nos ayudan a regular los niveles de tensión arterial.
El vino disminuye las posibilidades de tener hemorroides y evita las várices.
La sidra y el vino tienen acción antibacteriana y antihistamínica; reduce las alergias
La sidra es vasodilatadora, lo que la convierte en un componente esencial para rebajar la presión sanguínea en casos de hipertensión.
Calorías Sidras 49,90 kcal. (110gr) Calorías Vino 70,72 kcal (100gr).
Entre las propiedades nutricionales de la sidra cabe destacar que tiene los siguientes nutrientes: 0,49 mg. de hierro, trazas de proteínas, 8 mg. de calcio, 0 g. de fibra, 72 mg. de potasio, 0 mg. de yodo, trazas de zinc, 6 g. de carbohidratos, 3 mg. de magnesio, 7 mg. de sodio, trazas de vitamina A, 0,01 mg. de vitamina B1, 0,01 mg. de vitamina B2, 0,01 mg. de vitamina B3, 0,03 ug. de vitamina B5, 0,01 mg. de vitamina B6, 0,60 ug. de vitamina B7, 0,10 ug. de vitamina B9, 0 ug. de vitamina B12, 0 mg. de vitamina C, 0 ug. de vitamina D, trazas de vitamina E, 0 ug. de vitamina K, 3 mg. de fósforo, 49,90 kcal. de calorías, 0 mg. de colesterol, 6 g. de azúcar y 0 mg. de purinas.
Entre las propiedades nutricionales del vino tinto cabe destacar que tiene los siguientes nutrientes: 0,90 mg. de hierro, 0,23 g. de proteínas, 7,60 mg. de calcio, 0 g. de fibra, 93 mg. de potasio, 0 mg. de yodo, 0,05 mg. de zinc, 0,30 g. de carbohidratos, 11 mg. de magnesio, 4 mg. de sodio, trazas de vitamina A, 0,01 mg. de vitamina B1, 0,02 mg. de vitamina B2, 0,09 mg. de vitamina B3, 0,04 ug. de vitamina B5, 0,02 mg. de vitamina B6, 1,40 ug. de vitamina B7, 1 ug. de vitamina B9, 0,01 ug. de vitamina B12, 0 mg. de vitamina C, 0 ug. de vitamina D, 0 mg. de vitamina E, 0 ug. de vitamina K, 14 mg. de fósforo, 70,72 kcal. de calorías, 0 mg. de colesterol, 0,17 g. de azúcar y 0 mg. de purinas.
Tanto la sidra como el vino debido a su contenido de alcohol, debe tomarse con moderación. Los grados de alcohol de la sidra están en torno a los 3,70º.. Los grados de alcohol del vino tinto están en torno a los 9,82º